martes, 21 de septiembre de 2010

Martes 21 EPÍGRAFE

Quien no anda sobre ascuas
nunca verá a las luciérnagas.



I

Mi yo descalzo sobornó a la razón
y al desencanto,
al conformismo de ser la gris efigie,
la prostituta incombustible
dueña y señora de su abismo.

II

Salté al vacio y remontaron las aguas,
me aguardaban con apéndices de bruma,
resucitada entre los muertos,
exhumada en alma y bautizada.

III

Un elenco deshabitado de vaticinios
me da las gracias, se manifiesta,
nunca desande un camino
yo lo desgarré por contextura
con el devenir asestándome con arma blanca,
pero nadie puede
nada cabe
nadie pudo contra mis costillas aleadas
y ahora me deleito en sonreírle al mundo,
soy paciente en el intento de no serlo,
tengo un averno frustrado
y un nirvana que se consolida con mis pies curtidos.