Toda la noche soñando difusa
confundiendo las verdades,
despertándome en tinieblas
y durmiendo en el albor.
Me he levantado agitada
con ojeras y cansada,
igual que el viento que hostiga
y se hace oír indecoroso,
quiere llamar mi atención.
Desea revelarme algo.
Concluyó un tercio del año,
el tiempo lo dejó olvidado,
y fraccionará este cuarto
como el que estrena un cobijo
que da calor a los días
y menguan su luz forzados.
Mi cuerpo yace entumecido
y siento el calor en mi cama.
Aunque mucho a mi pesar
hay que retomar el ciclo.
Y sin darle más demora.
Primero pondré el pie derecho,
y luego ya lo iré viendo.