lunes, 30 de noviembre de 2009

Lunes 30 Viaje sin regreso






















Esperando en el andén,
curiosa y perdida en detalles
de pilares esmaltados
marquesinas del edén.

Solo su abrigo de paño 
y la sonrisa sutil,
custodiando su esperanza
su espejismo y su placer.

Mira el reloj, el más blanco, 
el que se ciñe a su piel,
vaga pausada y dilata
a que arribe su querer.

Los sueños a veces concluyen
y ella tomará el riel,
el que se pasa y discurre
y consiente en no torcer.

Sus ojos se han visto velados
entre el humo y el cristal,
rompe el molde, grita a hierro,
nadie puede contener.

Y entre las sombras dos luces 
que se buscan donde estén,
siguen sus líneas quebradas
rompiendo el aire al revés.

Almas errantes, coimas
que se encuentran en el tren,
carta de ida sin vuelta
nunca regreso al desdén.