jueves, 16 de junio de 2011

NO TENEMOS LO QUE MERECEMOS

NO TENEMOS LO QUE MERECEMOS
No podemos ser la hostilidad del sinsentido,
no podemos  ser el nombre que se rasga
para atenuarse en diligencia vejatoria,
nos va la vida y aún así,
la vista ajena se hace ajena,
los ojos se han tornado del cristal del que no mira,
y el color no existe
y lo profano se hace escuela
de miserias que no son extrañas,
que se tornan ciénagas
en cada páramo maltrecho,
y es que el sol ya no amanece
tras el crepúsculo de párpados.