
Hoy tenemos un Domingo más
que no será nunca un de menos,
aunque blanquecino el cielo
y distorsionados sueños
volveré a escribir sobre este día
que precede a los siguientes.
D-Domingo,
Dictado de mis ancestros,
queridos y ausentes.
O-Domingo,
Odisea sin regreso
danza en las ascuas trenzadas.
M-Domingo,
mansas las auroras,
noche vieja en la semana.
I-Domingo
Ilusiones que renacen,
un capítulo escarlata.
N-Domingo
nocturno en las tardes de otoño
entrañables y mutables.
G-Domingo
grandioso, alimentado de recuerdos
de las albas deslizadas.
O-Domingo
oscuridad deleitable
que me conduce a la lumbre.
Hoguera, fuego, llama,
me encamino hacia mi chacra
de esta mi no soledad
mullida alfombra en mi estancia.