lunes, 23 de abril de 2012

La noche me intimida y me puntea con su dedo índice, lo afila y redunda con la sombra de su mismo apéndice sobre mi cuello para finalmente descabellar con acierto una nuca que se exhibe tras la impostura de mis ojos.

domingo, 15 de abril de 2012

DIVAGACIÓN I-12

Los golpes sobre la mesa nunca se me han dado demasiado bien,
soy una marea lenta  y prolongada en esta longitud de brazo,
subo y me derramo, impacto sobre el malecón de los intrusos
con una contundencia de relámpago  y el estrepito audaz de algún silencio roto.

Quiero provocar con la insolencia de este miembro convertido en puño
con la mirada angelical del que no rompe lozas
y aparecer con la camisa desgarrada por el sobresalto
de algún ruido inesperado a impulso de latido y trueno
demostrando a nadie que con palabras pueriles se vegeta,
con las inexistentes se acontecen los futuros
y que de miles de intenciones no se mata.
El disimulo o la afonía imaginaria es el crepúsculo de las tareas fatuas.

martes, 10 de abril de 2012

Quedarme sin palabras es un riesgo
al que no debo sucumbir,
es un acto innegociable ante la poesía,
porque a mí, ¡Ja! a mí,
¡Me lloran las ganas de corresponder al tiento!
Transpiro reconcomios
por el lado más mundano
y tal vez escupa más de lo debido,
pero soy una pequeña sobra
de disertaciones que se mueren
en caminos que se vuelven extranjeros.