domingo, 27 de septiembre de 2009

Domingo 27 Pereza



Hoy se me han pegado las palabras,
los pequeños estímulos eléctricos que
martillean mi cerebro
se resisten a arrimar el hombro.
¿Será porque es domingo y todavía estoy adormilada,
o es puramente pereza?
Mis manos pesan sobre este negro teclado,
dedos inertes sin atmosfera que los atraiga
sobre la gravedad de cada letra.
Mi perro me observa acostado, ahora con ojos cegados.
Los niños dormitan, y tengo trabajo,
la plancha, comida, los platos, los baños.

Aunque la plancha es liviana, comida precocinada,
los platos ya están lavados
Y los baños, los baños mañana
que empezará un nuevo ciclo.
Porque  hoy es domingo, domingo, domingo……………..